¿Cómo venderse en el trabajo? Una forma de ganarse la primera impresión en el trabajo y ser recordado es ir más allá de una breve descripción acerca de mi formación académica y de los años de experiencia que poseo. Prácticamente el Curriculum vitae, aporta esa información al empleador.
Por lo tanto, el patrono estará interesado en conocer, cómo puedo contribuir a la mejora organizacional de la empresa, sea pública o privada. A partir de esta interrogante es cuando entran a jugar un papel preponderante las habilidades políticas positivas.
Para ello requiero de táctica y estrategia si realmente estoy convencida de dejar una huella importante en mi organización sin perder de vista que mis actos se guíen en todo momento por la ética y el respeto hacia los que me rodean sean agentes internos o externos a la empresa.
La forma de comenzar es propiciando un cambio en primera instancia interno de mis actitudes y fortalecer mis aptitudes; aunado a la apertura para intercambiar ideas, experiencias, comunicarse, mantener buenas relaciones interpersonales, innovación, creatividad, flexibilidad, capacidad de respuesta y sobre todo vocación de servicio.
En cuanto a la interrogante, ¿qué no hacer a la hora de ir a una entrevista?, menciono los siguientes aspectos:
F No ser capaz de mencionar de qué forma se puede contribuir a la mejora organizacional
F No escuchar y preguntar, acaparar la conversación durante la entrevista
F Volver a reiterar lo que ya el Curriculum vitae contiene
F No saber proyectar una huella emocional positiva en el entrevistador
F No saber construir una credibilidad de que soy la candidata que está necesitando la empresa
Bibliografía:
DuBrin, A.J. (2008). Relaciones humanas: comportamiento humano en el trabajo. Naucalpan, México: Pearson Educación.
Zamora, M. (2012). Presentación: Habilidades políticas positivas. Curso Freshman Seminar. ULACIT. San José, Costa Rica.